Michelle Garrett

Me interesé en la enfermería de hospicio cuando aún estaba en la escuela de enfermería. Durante ese tiempo, me convertí en voluntaria de hospicio y disfruté trabajando con los pacientes y sus familias. Me pareció que era una buena opción para mí. También he trabajado en el entorno hospitalario y en enfermería especializada con adultos con discapacidades del desarrollo. Cuando por fin encontré un trabajo en una empresa de cuidados paliativos, supe que por fin estaba en el lugar correcto.

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La gente me pregunta a menudo cómo puedo hacer mi trabajo y no sé qué decirles porque, al final, es muy gratificante. Puede ser una montaña rusa emocional, pero intento ponerme en el lugar de la otra persona y brindarles cuidado y consuelo durante el tiempo que paso con ellos para brindarles una mejor calidad de vida de la que hubieran tenido sin un hospicio.

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Empecé a trabajar en Apex Hospice en 2018 y estoy muy feliz aquí. Siento que es mi hogar. Estoy rodeado de colegas que tienen ideas afines y lo dan todo. Nadie está demasiado ocupado para ayudar con un problema, ya sea para tratar los síntomas o el cuidado de una herida o simplemente para desahogarse después de un día particularmente difícil. He trabajado con varios médicos de hospicio maravillosos y realmente aprecio la confianza que depositan en mí para hacer mi trabajo y el respeto que sienten por mi contribución cuando colaboro en la atención de los pacientes.

Apex cuenta con un increíble equipo de profesionales de la salud que no encontrará en ningún otro lugar y me enorgullece estar entre ellos.